Sabemos que la situación de internación hospitalaria lleva a perder gran parte del contacto con el mundo exterior, la vida cotidiana cambia y las tareas que el niño realizaba en su cotidianeidad deben ser abandonadas. Por otro lado, sus padres y/o acompañantes, como así también médicos y enfermeras, se ven ocupados por las cuestiones médicas relacionadas a la enfermedad del niño. Esto conduce muchas veces a un retraimiento en el estado anímico del paciente. Por eso, consideramos una prioridad brindarle un espacio donde pueda expresarse libremente y, sobre todo, “comunicarse” con los demás. ¿Qué mejor para ello que el juego?

Jugar es un Derecho del Niño
Jugando es como el niño desarrolla su creatividad e inteligencia, aprehende y comprende su realidad, permitiéndole afrontarla y transformarla desde un lugar saludable. Jugando, demuestra que además de “paciente”, es un sujeto activo y creador.

nariz de payaso¿POR QUÉ EL PAYASO?

Utilizamos la técnica de clown como herramienta para potenciar la capacidad lúdica del niño. El universo del clown está colmado de características de los niños que permiten una fácil identificación con él: la curiosidad, la ingenuidad, la sinceridad, la mirada clara, la espontaneidad y la imaginación.
Los niños se identifican con el payaso porque éste hace todo lo que ellos quieren hacer. De esta manera, por medio de él y del juego que éste propone, proyectan sus deseos.

nariz de payaso¿CÓMO LO HACEMOS?

Partimos de la idea de que la salud del individuo comprende el estado completo de bienestar físico, psíquico y social.
Utilizando la técnica de clown acompañamos al paciente hacia un estado lúdico, donde mediante el juego pueda expresar sus ansiedades y comunicarse con los demás.
El desarrollo de las intervenciones varía de acuerdo a la situación de cada paciente y a los espacios y situaciones que se pueden encontrar en el hospital. Por eso, podemos hacerlo en salas de internación, salas de procedimientos intervencionistas (diálisis, transfusiones, extracciones, etc.), UCI, cuidados especiales, áreas de aislamiento, pasillos y lugares de espera.
Trabajamos en intervenciones de corto, mediano y largo plazo, según las necesidades de cada paciente y su tiempo de hospitalización.

nariz de payaso¿QUÉ LOGRAMOS?

Habilitamos un espacio lúdico en el que el paciente pueda abandonar la pasividad, revalorizando su condición de niño más allá de su enfermedad, promoviendo de esta manera su vinculación positiva con el entorno, tanto familiar como hospitalario.
Así logramos que el proceso de internación hospitalaria sea una experiencia menos traumática y/o negativa para el paciente, entendiendo que un buen estado anímico del mismo favorecerá una mejor aceptación del tratamiento médico.